jueves, 19 de mayo de 2011

Críticas realistas a la prensa especializada. Primera entrega

Algunos de los que me conocéis, sabréis ya que dentro de mis muchas vías de entretenimiento están las revistas de jóvenes adolescentes, o para que engañarnos, proyectos de putilla. En estas revistas te dan consejos de belleza, hablan de series de actualidad, cotilleos de famosos y demás mierda. No obstante tienen una sección que es la que suscita mi interés, más que nada por la poca verdad que en ella se suele verter: la sección de ligue. Vale, si, no es que yo sea un experto en la materia, de hecho, si yo tuviese que escribir una guía de como conquistar a una mujer, leída del revés tendría un alto porcentaje de efectividad, pero hay cosas que claman al cielo y puede que no sepa camelar a una dama pero, como hombre, se cómo se podría embaucar a uno de mis semejantes.

No es momento ahora de recordar una vez más que las revistas de antes enseñaban a ligar de forma más decente, a encontrar el verdadero amor y esas cosas. Sobre eso hable largo y tendido en mi ya malogrado Fotolog, puede que alguien hasta lo leyera, porque es cierto, la antigua Vale daba consejos guays y elaborados pero desde que cambio el formato a "Nuevo Vale" se han perdido los valores. Pero bueno, este no es el tema que nos ocupa. Lo que vengo a decir es que si queréis enseñar a las niñas a llevarse a todos los tíos, adelante, pero debo deciros que os iría bien tener a algún hombre heterosexual en la redacción que pueda contrastar la efectividad de vuestros consejos.

Para tal efecto, voy a coger un artículo que he encontrado en la web de la SuperPOP que me ha llamado la atención especialmente y corregiré uno por uno los puntos allí expuestos:

El artículo es sobre como ligar en época de exámenes y, desde luego, no tiene desperdicio alguno. Aquí lo dejo (con mis comentarios en negrita).

Aprovecha los exámenes para ligar

                                                                                  

1. Antes de todo, acércate para estudiar
Para empezar, lo más importante de todo ¡son los días antes a los exámenes! No pierdas la oportunidad de aprovechar para estudiar con él. La frase de «es que yo no tengo ni idea y a ti se te da genial» ¡siempre funciona! O también puede ser al revés: si sabes qué asignatura se le da fatal, échale tú un cable, no rechazará tu oferta. ¡Los exámenes son importantes para todos!

La frase "es que yo no tengo ni idea y a ti se te da genial" es menos efectiva que un Charmander en el primer gimnasio. ¿No os dais cuenta de que diciendo eso ponéis a la víctima en un compromiso?. Si ya prou mal me iban a ir los exámenes, ahora que además me ponen presión externa... lo llevo claro.

La segunda opción, la de ofrecer ayuda, ya está mejor. De todas formas lo más probable es que acepten la ayuda para aprobar, no para ligar con vosotras, porque bien es sabido que una tía (un tío también, pero estamos a lo que nos ocupa) puede cumplir solo dos de estas tres características: Estar buena, ser inteligente y ser maja.

Damos por hecho de que si ofrece ayuda es maja así que una de dos, o es más fea que comer con la boca abierta o más le va a valer al tío estudiar por su cuenta.

2. No pierdas el contacto directo
Si te lo pone difícil y no queda para estudiar, ¡pasamos a la tecno! Es el momento perfecto para pedirle su mail o su facebook… ¡y bombardearle a preguntas durante la tarde-noche antes del examen! También puedes abrirle un privado en face y, para que no se raye, le dejas claro que sólo vais a hablar de clase y del examen en concreto. ¡Seguro que no te lo cierra y que la conversación acaba mejor de lo que crees!

No me jodas, ¿quieres ligar con el preguntándole cosas del cole? La tarde-noche antes de un examen o bien se está estudiando para uno mismo o jugando al Call of Duty para relajarse. Preguntarle mierdas del examen lo único que va a hacer es que te coja asco, tú misma...

Una buena táctica sería proponerle una celebración de fin de exámenes, algo así como:

-"Oye, después de exámenes podríamos celebrarlo, ¿no crees?" (El "¿No crees?" al final de la frase es para dar un toque más de serie americana, ambienta mucho estos menesteres)

-"Uff, si es que no voy a aprobar..."

-"Yo sí que te voy a probar, guapo!"

No es bonito, lo se,  pero cuanto menos es directo, y las expectativas de fellatio, queráis que no, decantan bastante a vuestro favor la decisión que un chico pueda tomar al respecto de quedar o no con vosotras. Para cumplir con las expectativas creadas siempre se puede recurrir a otros artículos de la revista, que seguro que explican cómo hacerlo correctamente o bien probar con un plátano (si no dejas marcas, es que lo estás haciendo bien), eso ya como prefiráis. Yo no soy partidario de este tipo de estrategias, pero a juzgar por la dinámica general de la revista, es lo que os deberían haber recomendado.

3. «¿Quedamos media hora antes para repasar?»
Nunca falla… Díselo el día anterior para prepararte a tope. Ese día, ponte tu mejor look y no olvides unas gotitas de esa colonia tan especial. Es un buen momento para sentaros juntos en el pasillo antes de que empiece el examen, para acercarte a él más que nunca, para mirar sus apuntes mientras él también lo hace… Vamos, que es el instante perfecto para quedarte sólo a unos centímetros de él. ¡Le encantará!

¡Si venga! No tengo bastante con levantarme a las 7 pa ir a hacer un examen, que me voy a levantar a las 6 y media. Esto si tu chico vive al lao del cole, bueno, pero si vive a tomar por el culo, pues ni se lo propongas, que ni que seas el amor de su vida va a aceptar. Además, tienes un examen coño, tan guapo es el tío, como pa no aprovechar esos minutos pa repasar por tu cuenta? Así va España, si las revistas te dicen ya que es más importante conquistar a tu chico que sacarte el graduado, nos va a sacar de la crisis Rita la Cantaora.

4. ¡Momento clave!
Toca entrar a clase y sentarse… ¡Aprovecha para decirle que se siente a tu lado! Bien cerca, que no se te escape. Suéltale alguna excusa y cuando menos se lo espere le lanzas: «Es que tú me das buena suerte…». Te giras ¡y ya no le digas nada! Se le caerá la baba y se le olvidará todo lo que ha estudiado ¡de golpe!

¡¡Genial!! ¿¡¿¡¿¡pero qué clase de zorras sin escrúpulos quieren crear esta gente!?!?!? Juro sobre las tumbas de mis ancestros que el día que una mujer me haga olvidarme de todo lo que he aprendido para una examen, esa mujer no tiene suficiente España pa escapar de mi ira. Un poco de solidaridad coño, deséale suerte y que él haga lo propio y punto. O mejor aún, no te entrometas en sus estrategias, porque él lo mas seguro es que tenga ya unos amigos con los que haya diseñado una estrategia perfecta de colocación en el examen y, si es un tío mínimamente guay, no abandonara a sus hermanos por ninguna mujer.

5. ¡Hora del examen!
No te la juegues por mucho que te pida ayuda… ¡cuidado! Eso sí, demuéstrale que estás ahí y que siempre puede contar contigo. ¡Pero ojo con el profe! Al salir, pregúntale siempre cómo le ha ido y si la respuesta es buena… ¡a celebrarlo! Hazle alguna propuesta, estará tan contento que te dirá que sí. Aunque si ha salido de bajón total, no elijas esa opción. ¡Dale algún consejo, cambia de tema y anímalo como tú mejor sabes!

Totalmente de acuerdo con este punto. Procedamos

Puntazos que te ayudarán…
Si no consigues estudiar con él los días antes, déjale tus apuntes. Puedes escribir alguna frase de amor ¡donde menos se lo piense! O poner iniciales y mensajes secretos. Verá que eres súper romántica, original y misteriosa. ¿Has conseguido estudiar en su casa? Lo que va genial es dejarte algo olvidado allí… ¡tendrá que llamarte fijo! Otra táctica en su casa… Si no tienes todavía su número, podrías pedirle que te deje su móvil con la excusa de que te has olvidado el tuyo y tienes que llamar a tu madre. Hazte a ti misma una perdida ¡y será tuyo! ¿Es él quien va a ir a tu casa? ¡Prepara bien tu habitación para que flipe! Piensa que está en tu terreno y juegas con ventaja… Y deja encima de la cama o escritorio lo que más te interese que vea ¡para empezar alguna conversación más íntima! Como fotos importantes para ti…

Esto en cambio es todo un despropósito. Si alguien se ha sentido en la necesidad de pedirme a mi ¡A MI, JODER! que le ayude en un examen, creedme que lo último que quiero para estudiar son sus apuntes. Y en caso de que los acepte y vea dibujitos de corazones y cosas así lo último que pensare es que eres "original y misteriosa" si no "Coño! con razón necesita mi ayuda, pobre"

Lo de la casa está mejor pensao, pero aunque a los señores de SuperPOP no les importe, yo me siento en el deber de recomendaros que lo dejéis pa después de exámenes, porque en una casa vais a hacer de todo menos estudiar, y no vale la pena perder la evaluación por un tío. O eso es lo que dice el pequeño padre que hay en mí

Y al final, sorpréndelo
¡Exacto! Cuando termine el examen y hayan pasado unos días, casi no le hables. ¡¡¡Lo que lees!!! Fijo que se acerca a preguntarte qué te pasa. Entonces, coméntale con total naturalidad: «Ay, es que pensaba que sólo querías que te ayudara con el examen y ya está…». ¡Te dirá que no es así! Que para nada… ¡que eres su amiga y que le encanta estar contigo! Y es que lo ha podido comprobar todos esos días… Ya verás cómo en los siguientes exámenes te pide tu ayuda sin dudarlos. Y al final deseará estar contigo tanto si hay exámenes como si no… ¡y recuerda que se acercan las vacaciones! ¡Suerte!

Señora redactora, antes de nada permítame poner en duda que usted haya comprobado nada. Si estas son sus técnicas, no me quiero ni imaginar cómo serán los dueños de las camas en las que usted se ha levantado. Y luego, eso de no hablar está muy feo. Si te ha ayudado él, invítale a unas cañas ostia, ¿que menos? Y si le has ayudado tú, él seguro que está encantado de invitarte a ellas, porque en eso sí que es verdad que es de bien nacido el ser agradecido.



Quiero aprovechar ya que estamos para pedir a alguna de estas revistas que me de trabajo, que la vida está muy mal, y sus revistas están peor. Puede que pronto vuelva con más artículos, o puede que no. Hasta entoces ¡Agur!
¡Hasta la siega del pepino!

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